Dignidad y justicia durante la Semana Solidaria

Durante la semana solidaria hemos tenido la oportunidad de compartir diferentes actividades, reflexiones y encuentros en torno a la justicia y la dignidad. Ha sido especialmente enriquecedora la posibilidad de conocer experiencias vitales de mujeres valientes de nuestro entorno.
La solidaridad se basa en el reconocimiento de la dignidad común de todas las personas. Para entender el verdadero sentido de los términos «dignidad» y «justicia», es imprescindible conocer y reflexionar en torno a otras realidades; trabajar la empatía, el respeto; incidir en nuestro entorno para promover una ciudadanía comprometida con todas las personas. Ese ha sido el objetivo durante la Semana Solidaria: generar propuestas educativas encaminadas a construir una sociedad más solidaria y transformadora. La semana solidaria Del 18 al 22 de febrero hemos tenido la oportunidad de trabajar la solidaridad de manera diferente: a través de experiencias vitales que nos ha acercado «otras miradas». Para dar comienzo a la semana se acercaron a la escuela varias mujeres que practican diferentes modalidades deportivas para compartir sus experiencias.











Gaur hemen aurkezten naiz
neska bat bezela.
Esango dizuet
bertsotan horrela
gauza bat esateko
hurbildu naizela
nahi duguna egiteko
askeak garela.
Solidaritza astea
heldu da eskolara.
Emakume ausartak
ezetzen ari gara.
Berdintasuna beti
hor egoten bada,
biziko gara denak
pozik ta bakean.
Garelako (canción)
Entre otras actividades, las alumnas y alumnos de Primaria realizaron juegos de agua en la clase de Educación Física y tuvieron la oportunidad de reflexionar a través de las manos de mujeres de diferentes orígenes.

Para terminar la semana, el viernes, la rumana Anca-María Holbea, la china Weili Li, las nigerianas María Aboh y Eunice Osagie nos acercaron a las costumbres, la indumentaria y la gastronomía de sus respectivos países.
También hablamos sobre el proyecto puesto en marcha por Mariam El Harrakek de la asociación Al Nour para dar respuesta a las dificultades de las mujeres inmigrantes (En la actualidad, se realizan diferentes actividades con niños y mayores, en la casa Pinondo). Este encuentro intercultural nos enriqueció más, ayudándonos a comprender y respetar mejor las lenguas y los hábitos de los demás, invitándonos a convertir el mundo en un hogar para todas las personas.
Con el objetivo de fomentar el comercio justo, durante toda la semana hemos instalado en el patio una tienda solidaria.
Como colofón a la semana solidaria, educadores, alumnado y familias nos reunimos en el «Arroz Solidario»: acabamos la semana con música africana y compartiendo, de nuevo, el verdadero sentido de la igualdad y la solidaridad.





Categoría: Incidencia social, Carisma ignaciano
